Existe una gran variedad en los postres típicos de Castilla y León. Esta ciudad se caracteriza por su amplia gama en sus sabrosos postres. Siendo Castilla y León una comunidad que le da mucha importancia al dulce, sin dudarlo ellos son muy reconocidos por su gastronomía en esta área.
No es por alardear, pero los postres típicos de Castilla y León son extremadamente exquisitos y si un día tienes la posibilidad de comerte uno, no lo desaproveches.
Castilla y León tiene la virtud de elaborar los mejores postres y esto se debe a su habilidad en producir alimentos con una muy buena calidad.
La producción de alimentos es la principal actividad económica muestra de la historia de Castilla y León. Es el relato de sus costumbres y tradiciones que a medida que pasan los años, estas se mantienen.
Su cultura se ha visto expuesta luego de tanta similitud globalizada consecuencia de los estándares impuestos por la industria alimentaria. Así mismo, Castilla y León ha logrado mantener sus tradiciones a pesar de todas las dificultades que se han presentado.
El principal impulso para el desarrollo de su economía ha sido la creación de productos muy particulares y artesanales. Cualidad que ya se ha perdido en muchas industrias debido a los estándares ya establecidos por la sociedad.
Castilla y León se caracteriza por la calidad de su trabajo y lo seguirá haciendo por el resto de los días.
La gastronomía de Castilla y León se destaca por su gran variedad de postres. Unos mucho más sabrosos que otros, pero siempre se te hará muy difícil escoger uno entre la larga lista de postres.
Si tienes la oportunidad de probar uno los postres típicos de Castilla y León, asegúrate que sea uno de esta lista:
Galletas de mantequilla elaboradas artesanalmente en nuestra instalaciones. Nuestras galletas están hechas basándose en la receta tradicional, sin colorantes, ni conservantes. Están deliciosas, tanto para desayunar como para tomar un cafetito, una infusión o un chocolate caliente a media tarde. Les gustan a los niños y a los mayores. Si las pruebas, repetirás.
Este dulce tiene una característica muy peculiar e irreconocible en cualquier lugar que los veas. Cuando te lo llevas a la boca, inmediatamente sentirás cómo se deshacen y con suave textura quedarás atrapado en su delicioso sabor. Elaboradas en el Bierzo.
Como la mayoría de los postres más típicos de Castilla de León, su elaboración se hace manualmente y es artesanal, pero las puedes conseguir en la Moncloa de San Lázaro.
Puede ser un postre con una apariencia muy sencilla, pero su sabor no se compara con ningún otro. Los Merles de Astorga es uno de los postres típicos de Castilla y León. Tan solo son unos hojaldres rellenos de una rica crema.
Si te da curiosidad el conocer cómo se prepara, te tendrás que quedar con la duda. Esto se debe a que los mejores Merles de Astorga se preparan en la confitería La Flor y Nata. Pero ellos se han encargado de mantener la receta en secreto de generación en generación y han estado cocinando este delicioso postre desde el año 1995.
Lo más interesante es que apenas el reloj marca las 14:00 estos sabrosos postres se agotan. El motivo de esto es por lo especial que es el postre para los nativos de la ciudad.
Son más comunes de conseguir en zonas como el Portillo, Aldeamayor de San Martín o Arrabal de Portillo. Pero de que las vas a conseguir, lo harás. Es uno de los postres más conocidos en la gastronomía de dulces en esta provincia.
Es un postre que se caracteriza por su tamaño alargado. Son elaboradas a base de harina de trigo, manteca de cerdo, vino blanco, azúcar y clara de huevo. Por sus ingredientes te podrás imaginar lo delicioso que es su unión.
Su esencia comienza desde el primer momento en el que muerdes este postre porque te ofrece un contraste de texturas y sabores.
Este maravilloso disfrute da inicio desde la crocante capa blanca que cubre por completo a la galleta, hasta el interior del mantecado. Pero su sabor es de los dioses porque con su toque dulce y de anís, te deja con ganas de comer miles de los postres típicos de Castilla y León.
Es un dulce que con facilidad puedes acompañar desde una taza de café o de chocolate, hasta una copa de vino.
Hasta la actualidad se desconoce el origen de las yemas de Santa Teresa. Algunas personas dicen que nacen de la gastronomía arabe, mientras que otros cuentan que se origina de la repostería monacal del convento Santa Teresa de Ávila y a esto se debe su nombre.
Es un dulce que a simple vista puede llamar la atención de varias personas por su color anaranjado que lo hace distintivo a otros de los postres típicos de Castilla de León.
Su preparación es sencilla, ya que podrás prepararla desde tu casa con muy pocos ingredientes, como la yema de huevo, el azúcar y el limón. Pero lo mejor de todo es su durabilidad, porque este delicioso postre típico se puede conservar hasta por 80 días.
Lo único es si verdaderamente aguantan esos días en tu casa, porque lo más seguro es que te los comas en 2 días con lo sabrosos que son.
Su sabor es gustoso para el paladar con su delicado toque de yema de huevo y canela. Por su agradable sabor se han vuelto tan famosas que una gran variedad de pastelerías en España han comenzado a comercializar el postre.
El rebojo es uno de los dulces más populares de esta comunidad, también es uno de los postres típicos de Castilla y León. Con su delicioso sabor, se gana el corazón de cualquier glotón que le encanta comer un exquisito postre.
Este se caracteriza por ser un pan muy similar al bizcocho. Pero su diferencia es que tiene un alto tamaño. Lo que más disfrutarás al probar este delicioso dulce es su esponjosa y fresca textura. Con su capa crujiente elaborada con azúcar que se agrega en la parte superior antes de hornearlo, llama la atención de muchos.
Al verlo querrás comerte unos cuantos rebojos porque con su simple forma, ya te quieres comer varios. Lo mejor de todo es que no es muy complicado hacerlos desde nuestro hogar y lo más seguro es que tengas sus ingredientes en tu cocina. Tan solo necesitarás azúcar, harina, levadura, mantequilla, huevos y la ralladura de un limón o naranja.
Un postre típico que con su simpleza puede estar en el top 3 de los deliciosos postres típicos de Castilla y León. Pero te recomendamos que al comerlo lo acompañes con un rico chocolate, café o hasta con un frío vaso de leche para que así te puedas deleitar aún más con su exquisito sabor.
Un dulce soriano que puedes conseguir en sus dos presentaciones: saladas y dulces. Es un postre típico artesanal y muy reconocido por todos en esta región de España. Su preparación es muy particular debido a que se origina de la unión de la leche de las razas de vacas frisona y pardo-alpina.
La mantequilla de Soria es un postre muy atractivo para el paladar, ya que su sabor es muy delicioso.
Este dulce tiene una textura aceitosa que es particular de la mantequilla, pero a la vez es muy delicada por su frescura.
Esta mantequilla es el resultado de un proceso laborioso que se consigue con el desnatado y la pasteurización de la leche. Luego de que se consigue la acidez indicada luego de la nata y el enfriamiento, se bate y se elimina el suero para luego amasar hasta que se consiga la textura perfecta.
La mantequilla de Soria es un dulce que lleva un buen tiempo para poder realizarla. Te recomendamos comprarla para que disfrutes los beneficios de su exquisito sabor.
La buena noticia es que tiene una infinidad de acompañantes como un pan o unas galletas, tan solo con cualquier unión podrás gozar de su sabor.
Los chochos son un delicioso postre típico que son muy particulares por su nombre y también por su alargado tamaño. Estos dulces se caracterizan por su color blanco y también por su forma desigual y ovalada.
Con su sabor indudablemente es uno de los postres típicos de Castilla y León que su delicado sabor a canela y almendras enamora a cualquier persona que los pruebe. Con su delicioso sabor suele estar en las mesas familiares en las épocas decembrinas.
Sin embargo, son consumidas durante todo el año porque nadie se puede resistir a su sabor y esperar tanto tiempo para comerlas únicamente en las navidades.
Puedes conseguir chochos de Salamanca en diversas pastelerías y confiterías. Pero sus cocineros verdaderamente mantienen en secreto su receta porque saben que le es muy rentable venderlas, ya que a las personas les encanta comer uno de los postres típicos de Castilla y León.
Lo mejor es que no solamente te las puedes comer acompañadas de un licor, también las puedes probar solas. Aunque te advertimos que este dulce contiene bastante cantidad de azúcar. Por lo tanto, no podrás comerte muchas de ellas.
Pero si vienes a esta zona, no te puedes perder de probar estas deliciosas bolitas llamadas Chochos. Si las pruebas, querrás volver a comerlas de nuevo.
Un postre típico con un sabor inigualable, cuando lo pruebes quedarás atrapado en su delicioso sabor. Lo mejor de todo es su sencillez, pero de todas formas te quedarás enganchado con su sabor.
El origen del nombre del postre viene desde el año 1978, cuando unos artesanos de la cocina se encontraban cocinando un delicioso queso con leche de oveja. Hasta que un día los especialistas del queso se enfermaron por un virus, pero los artesanos no se quedaron sin producir algo.
Mientras que el abuelo propuso unir un queso de Burgos, con miel y nueces. Dando como resultado la creación de este exquisito dulce.
Cuando comas un postre del abuelo, él siempre vendrá acompañado de un buen pedazo de queso fresco de Burgos. Al ser uno de los quesos más famosos y consumidos en Castilla y León, a los nativos les gusta aún más comerse este dulce singular.
Es un queso que se caracteriza por su frescura y su textura blanda, esto se debe al suero de la leche. Un queso muy conveniente de consumir al ser saludable, ya que no pasa por un proceso de maduración.
Pero lo más atractivo del dulce es su simpleza, debido a que tiene muy pocos ingredientes. Podrás disfrutar de este dulce desde tu casa porque tan solo necesitarás el queso fresco de Burgos, miel y nueces.
El éxito de uno de los postres típicos de Castilla y León, es la mezcla del dulce de la miel y nueces con el queso. Dando como resultado los buenos de dos mundos, el dulce y el salado.
Creado desde mucho tiempo atrás, en el año 1926. Dándose a conocer como uno de los postres típicos de Castilla y León. Su receta es original desde aquellos tiempos, así que si quieres disfrutar del delicioso sabor de un ponche de Segovia, tendrás que venir directamente a la confitería El Alcázar.
Un postre con una buena estética, particular en su estilo por su delicioso bizcocho y relleno de crema. Su capa de mazapán y glass lo hacen único en comparación a los diversos postres que puedes conseguir en Castilla y León.
Es un dulce muy delicado, pero que atrapa por sus sabrosas capas de bizcocho mojadas en almíbar y cubierto de mazapán y azúcar glass.
