Descripción
Un sumiller tira botellas, muchs botellas…
Es su época en elBulli, David Seijas tenía un pensamiento recurrente mientras transportaba las botellas vacías al patio de basuras. ¿Cómo uede ser que este magnífico vidrio acabe en el contenedor de reciclaje? ¿En serio estas botellas tienen sólo una vida? Años después, en el momento actual, esas reflexiones cogen más importancia que nunca y las recuperamos con una nueva pregunta. ¿Por qué todos los vinos de una misma marca deben tener la misma botella?
Con este proyecto pretendemos aportar nuestro grano de arena en la concienciación sobre la necesidad de reutilizar las botellas, complementariamente al reciclaje. Nosotros pensamos que un futuro diferente es posible y hemos trabajado junto al restaurante Enigma, de Albert Adrià, para crear un nuevo ciclo del vino. Cada botella disfrutada en el restaurante es recogida y gestionada cuidadosamente por la empresa POTS, quienes preparan los envases para que estos puedan volver a ser utilizados. El ciclo se completa en la bodega de Olga Verde, viñadora y nuestra guardiana en El Bierzo, donde se transforma en Lagalin, para iniciar un nuevo ciclo. Todo el proyecto se genera a partir de esta mirada, desde la etiqueta cubista, hasta los materiales seleccionados o las cajas, dentro de las cuales encontraréis un miso vino con 6 vestidos distintos, que a nosotros nos pone la gallina de piel. ¿Y a vosotros?
Crianza de 10 meses en barrica francesa sin trasiegos.
Añada 2022
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